Nieve de sangre: El peligroso fenómeno acelera el deshielo en la Antártida

La Antártida, el continente blanco, se está pintando de una extraña nieve de sangre o rosa, que acelera el calentamiento global y que pone en grave riesgo la subsistencia de la humanidad. La comunidad científica está en alerta por este extraño fenómeno que acelera el deshielo y que está ocurriendo en la temporada de calor.

Los científicos advierten que de extenderse, la nieve de sangre no solo afectará la Antártida, sino también podría afectar patrones meteorológicos y ecosistemas a nivel global. Te contamos los detalles.

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De acuerdo con estudios recientes, la nieve de sangre en la Antártida es el efecto causado por una microalga llamada Chlamydomonas nivalis, conocida también como “nieve de sandía” o “sangre de los glaciares”.

Esta microalga que naturalmente es de color verde, se observa de color rosa o rojizo cuando está expuesta a altos niveles de luz ultravioleta. Este fenómeno representa un verdadero problema en la Antártida , donde ya existe un peligroso deshielo estacional.

Los científicos señalan que la presencia de esta microalga en la Antártida representa un problema serio para la humanidad, pues se trata de un microorganismo que altera la capacidad de la nueve para reflejar la luz. Es decir, cuando la nieve está limpia es capaz de reflejar la luz, lo ayuda a controlar el deshielo.

Sin embargo, una vez que el alga se esparce sobre el hielo, ocasiona un fenómeno conocido como disminución del albedo; es decir, que la nieve de la Antártida, al teñirse de un color oscuro, absorbe más calor y se acelera el deshielo.

Estudios científicos advierten que la presencia de esta microalga puede ocasionar que el albedo disminuya hasta un 13%, durante el verano antártico. Una situación alarmante que podría provocar cambios climáticos en todo el planeta.

La comunidad científica señala que las consecuencias de que la nieve de sangre se extienda en la Antártida podrían ser desastrosas, pues el aceleramiento del deshielo contribuiría a la subida del nivel del mar y potenciaría el calentamiento global. Dos fenómenos que tendrían consecuencias gravísimas en el clima, la geografía y la subsistencia de los ecosistemas que habitan el planeta. Por supuesto, la nieve de sangre pondría en riesgo a la humanidad en cada rincón de la Tierra.

Aunque la causa de este fenómeno pudo ser identificado hasta este siglo, la verdad es que la nieve de sangre es un fenómeno tan antiguo, que incluso Aristóteles escribió sobre el tema. No obstante, es hasta ahora que las microalgas que provocan la nieve de sangre comenzaron a proliferar con mayor intensidad.

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