Icónico hotel embrujado de la CDMX; estas son sus leyendas y ubicación
Para los fans del terror y cosas paranormales es obligatorio conocer La Posada del Sol, un recinto que alberga el famoso hotel embrujado de la CDMX.
Si eres de los que les gustan las experiencias paranormales, ya debes haber escuchado o visitado el famoso hotel embrujado de la Ciudad de México (CDMX); pero en caso de que no lo conozcas aquí te compartimos información sobre su nombre, ubicación e incluso algunas leyendas que te animará a recorrerlo.
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Historia del Hotel Posada del Sol CDMX
La inauguración de este recinto se dio en 1945 y por varios años tuvo bastante éxito, el ingeniero Fernando Saldaña Galván realizó una construcción que se volviera icono de la gran ciudad, con estructuras al estilo art nouveau y art deco, así como un hermoso mural de Roberto Cueva del Río.
Se trataba de un gran hotel con una arquitectura que mezclaba estilo neoclásico, gótico, colonial y barroco, con radiantes jardines que rodeaban los 15 edificios que alojaban casi 500 habitaciones; era tan grande que llegó a servir como sala de cine y bodega de muebles abandonados. Sin duda era un lugar fuera de lo convencional, al que acudieron celebridades como Diego Rivera , Raúl Basurto y Salvador Echegaray.
Bienvenido a La Posada del Sol, un legendario complejo hotelero abandonado conocido entre los exploradores urbanos y, al parecer, también entre los cazadores de fantasmas.
Dónde se ubica el hotel embrujado de la CDMX
Lleva por nombre Posada del Sol y está ubicado sobre la Avenida Niños Héroes #139, en la colonia Doctores. Fue abandonado hace varias décadas y desde el cierre nadie ha regresado al lugar, bueno, al menos no como huésped.
La simple fachada del inmueble ya impone algo de asombro y misterio, al lucir tan abandonada y rodeada de vegetación. Lo cierto es que a pesar del tiempo el lugar se ha mantenido en pie.
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Leyendas del Hotel Posada del Sol
Hoy en día el lugar es conocido por sus famosas leyendas que abundan dentro de sus instalaciones, como la del creador y propietario del inmueble, Fernando Saldaña, se dice que su cadáver fue encontrado colgando de una campana del patio, frente a la escultura de San Francisco de Asís.
Desde entonces el fantasma del ingeniero aún recorren los pasillos del hotel. Y es que la razón de su muerte nunca estuvo del todo clara; hay quienes dicen que se suicidó por deudas que tenía para terminar la obra y otros aseguran que se quitó la vida tras haber matado a sus hijos y esposa.
Imágenes de La Posada del Sol, el hotel más embrujado de México.
Otra de las leyendas data de los años 60, cuando en el recinto se cuidaba a los niños de los trabajadores, se dice que en ese entonces una niña se extravió y a pesar de las labores de búsqueda fue hallada muerta en la habitación 103.
Las historias aseguran que su espíritu quedó atrapado, pero otros refieren a que podría ser la propia hija de Fernando Saldña, y que se aparece en diferentes sitios del hotel , aunque su lugar favorito es la habitación 103. Cabe mencionar que a manera de ofrenda, se le ha colocado un “altar” con dulces y juguetes.
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Quienes han acudido cuentan que por las noches es posible escuchar gritos y lamentos. Incluso existen rumores sobre cuartos y pasillos secretos y que en el sótano se han realizado algunos rituales.
¿Se puede entrar al hotel embrujado de la CDMX?
Se supone que el lugar fue expropiado por el gobierno y desde hace varios años se ha intentado poner en marcha distintos proyectos, pero ninguno se ha concluido, inicialmente se intentó convertir en la Procuraduría General de Justicia, luego en una sede Artes y Oficios e incluso en la administración actual se dijo que albergaría una universidad.
Lo cierto es que este hotel embrujado no ha tenido modificaciones; algunos aseguran que se requiere de un permiso en la delegación para poder acceder, pero otros han podrido entrar pidiendo “chance” al guardia de seguridad en turno. Así que si tienes curiosidad podrías aventurarte y contarnos tu experiencia.
Esta construcción de los años 40 lleva décadas sin ser usada, mucho menos para el propósito que se creó: ser un hotel lujosísimo.
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