De realeza y monarquías. Bitácora de Guerra por Hannia Novell

Bitácora de Guerra por Hannia Novell: Hablar de las monarquías no es, hablar de una historia tersa, amable o bella, es hablar de una historia dura; de combates.

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Escrito por: Hannia Novell
Bitácora de Guerra. Hannia Novell
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Bitácora de Guerra por Hannia Novell: Hablar sobre las monarquías no es, hablar de una historia tersa, amable o bella, es hablar de una historia dura; de combates, de guerra, de control social, de violaciones a las libertades, de política absolutista, imperial y expansiva.

Los Imperios Europeos de monarquías potentes en constate lucha y acuerdos de sangre se dieron desde finales de la edad media hasta el siglo XX.

Durante 10 siglos, nombres y regiones fueron relevantes tanto en la economía como en la explotación de los seres humanos.

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España, Francia, Inglaterra, Rusia, Alemania, y Portugal se repartían las zonas occidentales y después América.

Alejandro Magno, Carlos V, Enrique VIII, Luis XIV, Isabel La católica, son algunos nombres que ejercieron el poder absoluto en su época.

Absoluto, vertical totalmente como una respuesta de transformación de la anarquía feudal a la concentración de todo el poder en una persona “El rey” y su reino.

El sistema monárquico dividido como en una balanza, en el centro el rey, de un lado el clero y del otro la nobleza, un gabinete totalmente controlado por el supremo.

La iglesia en la monarquía

La iglesia ejercía entonces el poder de la balanza, por eso se daban cruentos enfrentamientos y expulsiones.

La corona se hereda en principio, pero es en todo caso por un mandato divino, allí el poder de la fe y la iglesia como un juego político de control de las masas.

El Reino Unido por eso expulsó a la iglesia católica y se acogió al protestantismo.

En España se expulsó a la orden jesuita y se implantó la persecución con la inquisición como respuesta a la revolución de las ideas y de las alternativas de fe.

La revolución francesa, dio los primeros pasos para derrocar a la monarquía absoluta ante una crisis mundial del sistema político y económico que tenía a los pueblos sumidos en la pobreza, mientras la iglesia, la nobleza y la familia real gozaban de la opulencia con los ánimos perpetuos de guerra y expansión. Los nobles vivían una especie de locura, también la iglesia y los reyes. Todo el poder en sus manos, sin cuestionamientos, sin objeciones.

Otra gran transformación ocurrió en Inglaterra con la reina Victoria, hacia 1850 ya todos los tronos peligraban, la pobreza había cobrado orden en la sublevación.

Los hombres querían ser ciudadanos, habían perdido la fe y la entrega a la corona, la población buscaba ser libre y participar en el estado, ser considerado un ciudadano y formar finalmente la República.

Cambios profundos se gestaron desde entonces, en el siglo XX, las monarquías pasaron a ser, una especie de observadores y garantes de la democracia parlamentaria o republicana, aunque , aquí mi asombro, es posible que en este siglo XXI a pesar de todo, la lealtad de los ciudadanos siga con un comportamiento de súbdito, siga existiendo una especie de fascinación por la realeza, por sus costumbres, como el gran padre o madre de sangre azul, que tiene todo aquel que nació bajo el sol de un reino. Una madre y padre que aun cuida a sus pequeños ciudadanos, a su pueblo feudal.

Aquí les dejo y mi punto de vista.

¿Cuál es el tuyo?

Bitácora de Guerra por Hannia Novell.
@HanniaNovell

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