Uno de cada 7 adolescentes tiene problemas no tratados de salud mental

Cada 40 segundos se suicida una persona en el mundo, así lo advierten investigadores de la UNAM, mientras que en México, de acuerdo con el INEGI en 2020 se registraron siete mil 896 suicidios, 700 más con respecto al 2019, de ahí que la salud mental sea un tema fundamental.

De acuerdo al informe anual del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), uno de cada siete adolescentes tiene un problema de salud mental diagnosticado y casi 46 mil dentro de este grupo de entre 10 y 19 años se suicidan.

La adolescencia es una etapa difícil en el sentido de que los individuos intentan desempeñarse adecuadamente en la escuela, llevarse bien con la familia, tomar decisiones importantes, entre otras, que pueden generar presión y preocupación; sin embargo, sentirse muy triste, desesperanzado o sin valor puede ser un signo de advertencia de un problema de salud mental.

El análisis hecho por Unicef “Estado Mundial de la Infancia 2021. En mi mente: promover, proteger y cuidar la salud mental de la infancia” también destacó que hay grupos especialmente vulnerables, como quienes ya tenían algún trastorno previo, las víctimas de violencia; así como los adolescentes en pobreza, migrantes o solicitantes de asilo, los que sufrieron aislamientos, separaciones y/o duelos debido al COVID-19.

Al menos uno de cada siete adolescentes en todo el mundo se ha visto afectado directamente por el confinamiento y más de mil 600 millones sufrieron alguna pérdida en su educación.

La alteración de las rutinas, así como la preocupación de las familias por los ingresos y la salud, hacen que muchos adolescentes sientan miedo, rabia y preocupación por su futuro.

Los problemas de salud mental son reales, dolorosos y, algunas veces, graves. El mayor inconveniente es que este tipo de padecimientos comienzan a manifestarse a través de las emociones, pensamiento o de la conducta y no de forma física o evidente.

Alguno de los signos que pueden ayudar al diagnóstico de enfermedades mentales pueden ser:

• Sentirse frecuentemente molesto o muy preocupado
• Sufrir por mucho tiempo una pérdida o una muerte
• Pensar que alguien o algo controla la mente
• Consumir alcohol o drogas
• Ejercitarse obsesivamente, hacer dietas y/o comer en exceso
• Lastimar a otras personas o destruir la propiedad ajena
• Sentirse deprimido (triste y sin esperanza)

Asimismo, las enfermedades mentales más comunes entre los adolescentes son la ansiedad, autismo, depresión, discapacidad intelectual y esquizofrenia, así como los trastornos por déficit de atención e hiperactividad, de bipolaridad, de conducta o alimentarios.

En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, celebrado este 10 de octubre , los expertos apuntan que es necesario priorizar los recursos para atender estas enfermedades y dar el acompañamiento adecuado.

A pesar de que los adolescentes están empezando a hablar de forma más abierta sobre sus sentimientos, es prioritario contar con un mayor apoyo por parte de los gobiernos, pues de acuerdo al mismo estudio de la Unicef, tan solo el 2 por ciento de los presupuestos de salud se destinan a atender la salud mental.

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