Estudio revela que el alcohol hace que las personas sean más propensas a dañar a otros o comportarse mal
El estudio concluyó que el alcohol alteraba los fundamentos de pureza y cuidado de las personas, pero no cambiaba sus fundamentos de justicia o lealtad
Un estudio reciente ha arrojado nueva información sobre el impacto del alcohol en el comportamiento humano, demostrando que incluso una sola bebida alcohólica puede aumentar la propensión de las personas a dañar a otros o a comportarse de manera inapropiada. Este hallazgo plantea cuestionamientos sobre cómo las personas bajo los efectos del alcohol perciben el bien y el mal, así como cuáles son sus intenciones al actuar en consecuencia.
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La investigación, realizada por Mariola Paruzel-Czachura de la Universidad de Silesia en Katowice, plantea una importante perspectiva sobre el impacto del alcohol en las decisiones morales de las personas. Aunque la relación entre el consumo de alcohol y la comisión de delitos es bien conocida, hay una escasa investigación que explora cómo las personas ebrias piensan acerca del bien y el mal, y si están dispuestas a realizar acciones moralmente cuestionables.
Todos vimos que las personas borrachas podían comportarse de manera inmoral o inapropiada, pero nadie antes que nosotros estudió esta tendencia en el laboratorio. Nuestro objetivo era probarlo, preguntando si los participantes ebrios estarían dispuestos a hacer algo mal
-Comentó Paruzel-Czachura
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¿En qué consistía el estudio?
El estudio, publicado en la revista “Psychopharmacology” , se llevó a cabo con la participación de individuos a quienes se dividieron en tres grupos: el grupo de alcohol, el grupo de placebo (aquellos a quienes se les hizo creer que estaban borrachos aunque no lo estaban) y el grupo de control. Cada grupo fue expuesto a una serie de escenarios y se les pidió que clasificaran su disposición a realizar acciones que iban desde “Lo haría gratis” hasta “Lo haría por 1 millón de dólares”, con la opción de rechazar la acción por cualquier cantidad de dinero. Estos escenarios incluían situaciones que exploraban hasta qué punto las personas estarían dispuestas a violar los cinco fundamentos morales fundamentales, como clavar un alfiler en la palma de un niño que no conocían o maldecir a sus padres en la cara.
Los resultados revelaron que el consumo de una sola bebida alcohólica afectaba la percepción de las personas en lo que respecta a los fundamentos de pureza y cuidado, aumentando su disposición a dañar a otros y a tener comportamientos “impuros”. Sin embargo, no se observaron cambios significativos en los fundamentos de justicia, lealtad o autoridad.
Mariola Paruzel-Czachura explicó que:
probablemente cuando las personas beben alcohol (una copa) siguen pensando lo mismo sobre cuestiones morales, pero al mismo tiempo, están más dispuestas a hacer algo malo
Esto sugiere que los efectos del alcohol en las decisiones morales pueden estar relacionados con cambios cognitivos y emocionales que ocurren después de su consumo.
Si bien algunos estudios sugieren posibles beneficios para la salud asociados con el consumo ligero a moderado de alcohol , otros han indicado que cualquier cantidad de alcohol podría aumentar el riesgo de desarrollar complicaciones de salud. Estos hallazgos enfatizan la importancia de comprender cómo el alcohol afecta tanto mental como físicamente a las personas, especialmente en un momento en el que cada vez más individuos de las generaciones más jóvenes están explorando la sobriedad como una opción para cuidar su salud.
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