Los beneficios del jengibre para la gripa estacional

La gripe estacional es una infección vírica aguda que afecta a millones de personas cada año, especialmente en los meses de invierno. Los síntomas más comunes son fiebre, tos, dolor de garganta, malestar general y congestión nasal. Aunque en la mayoría de los casos se resuelve sin complicaciones en una semana, puede ser grave o incluso mortal en personas con alto riesgo, como embarazadas, menores, ancianos o pacientes con enfermedades crónicas o inmunodepresión.

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Para prevenir la gripe estacional, lo más recomendable es vacunarse cada año, ya que los virus de la gripe cambian constantemente y requieren de nuevas formulaciones. Además, se deben adoptar medidas de higiene como lavarse las manos con frecuencia, cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar y evitar el contacto con personas enfermas.

Sin embargo, si ya se ha contraído la gripe, existen algunos remedios naturales que pueden ayudar a aliviar los síntomas y a acelerar la recuperación. Uno de ellos es el jengibre , una especia originaria de Asia que se ha utilizado desde la antigüedad por sus propiedades medicinales.

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El jengibre es rico en nutrientes como vitamina C, riboflavina, calcio, zinc, potasio, magnesio, fósforo y hierro. Además, contiene gingerol, un compuesto que le confiere su sabor picante y que tiene efectos antioxidantes, antiinflamatorios y antimicrobianos.

De acuerdo con un estudio publicado en 2013, el jengibre fresco puede ayudar a fortalecer y proteger el sistema respiratorio. Sin embargo, el jengibre seco no tiene los mismos efectos. Mientras que e l consumo diario de esta raíz curativa también aporta beneficios al sistema inmunológico y previene enfermedades crónicas, además de que es un excelente método para ayudar a la recuperación de resfriados comunes y gripe.

Los antioxidantes del jengibre también neutralizan los radicales libres que se generan por el estrés oxidativo causado por la infección vírica. Estos radicales libres dañan las células y debilitan el sistema inmunológico, haciéndolo más vulnerable a las complicaciones. El jengibre ayuda a fortalecer las defensas naturales del organismo y a prevenir el daño celular.

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El gingerol en el jengibre tiene un potente efecto antiinflamatorio que reduce la inflamación de las vías respiratorias y alivia el dolor de garganta y la ronquera. También ayuda a disminuir la producción de moco y a facilitar su expulsión. Además de la inflamación por enfermedades como la osteoartritis, según Medical News Today.

Por si fuera poco, tiene actividad antibacteriana y antiviral que puede ayudar a combatir las infecciones secundarias que pueden complicar el cuadro gripal. Además, el jengibre estimula la sudoración, lo que favorece la eliminación de toxinas y la regulación de la temperatura corporal.

Una de las formas más sencillas y efectivas de aprovechar los beneficios del jengibre para la gripe estacional es preparar una infusión con su raíz fresca. Para ello se necesita:

- Un trozo de jengibre fresco (unos 2 cm) o una cucharadita de jengibre en polvo
- Un litro de agua
- Miel al gusto

Se pela el jengibre fresco y se corta en rodajas finas. Se pone el agua a hervir y se añade el jengibre. Se deja cocer a fuego lento durante unos 15 minutos. Se cuela y se endulza con miel al gusto. Se puede tomar varias veces al día para aliviar los síntomas gripales.

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Otra opción es añadir otros ingredientes que potencien el efecto del jengibre, como el limón o la cúrcuma. El limón es rico en vitamina C , que refuerza el sistema inmunológico y ayuda a prevenir las infecciones. La cúrcuma es otra especia con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que mejora la respuesta inmune.

El jengibre también se puede consumir en otras formas, como cápsulas, jarabes, caramelos o alimentos que lo contengan. Sin embargo, se debe tener en cuenta que puede interactuar con algunos medicamentos o tener efectos secundarios en algunas personas, como irritación gástrica, ardor de estómago o alergias. Por eso, se recomienda consultar con el médico antes de usar el jengibre contra la gripe estacional , especialmente si se padece alguna enfermedad crónica, se está embarazada o en lactancia.

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