Remedios para curar el susto: Desde bolillo y mezcal hasta… ¿almendras?

Seguramente tú también has escuchado que comer bolillo después de experimentar un susto ayuda al organismo, sin embargo existen otros remedios que han logrado perdurar gracias a las tradiciones en México.

De acuerdo a un artículo publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el doctor Roberto Campos Navarro explica que el susto o espanto es una de las enfermedades culturalmente delimitadas en América Latina, al igual que el mal de ojo, el empacho, la caída de mollera y el mal de viento, las cuales no son reconocidas por la medicina académica y se tratan a través de la popular.

En la Biblioteca Digital de Medicina Tradicional Mexicana de la UNAM se habla sobre diversas formas de curar el susto y que tanto en casos leves como fuertes, el mejor paliativo es comer tortilla fría o pan duro.

La Real Academia de la Lengua Española define el susto como una impresión repentina causada por miedo, espanto o pavor, viene de sustar, y este del latín suscitāre, “excitar”, “suscitar”.

En otras palabras, el susto es producido por un evento sorpresivo y fuerte; y de acuerdo a las diferentes regiones de México y en general de Latinoamérica puede curarse con diferentes remedios.

Los expertos explican que ante un susto, el cuerpo comienza a segregar adrenalina y cortisol, lo cual acorta la respiración, acelera el ritmo cardíaco, los músculos se contraen, se alteran los niveles de glucosa en la sangre y sudan las manos; como si eso fuera poco, ante el estrés, se secretan jugos gástricos que pueden ocasionar acidez o náuseas.

Hasta el momento, no existe una investigación científica que confirme la creencia sobre si un bolillo puede ayudar a contrarrestar los efectos provocados por un susto, como la acidez o la gastritis.

Sin embargo, la Coordinación de Nutrición de la UNAM explica que el bolillo sí puede estabilizar la glucosa en la sangre y contrarrestar la sensación de “hueco en el estómago”, evitando el desmayo. Además, puede actuar como distractor ante la situación y sus carbohidratos inhiben la producción de ácido graso.

Asimismo, se detalla que masticar un alimento puede colaborar para mitigar los efectos del susto, es decir no debe ser exactamente un bolillo, este se puede sustituir por una tortilla o algún otro alimento que no sea dulce, a fin de estabilizar el aparato digestivo.

Sin duda uno de los mejores remedios es simplemente hablar de lo sucedido y es que el susto implica una impresión desconocida en el organismo y el verbalizar ayuda a procesar lo acontecido.

En algunas regiones de México, se acostumbra chupar una naranja agria o un limón , ya que esto ayuda a que el cuerpo se relaje. Pero después del bolillo, birote u otro alimento, otros de los remedios según las creencias es el alcohol y las hierbas.

Los efectos del alcohol en el cuerpo producen una sensación de calor y relajamiento; por lo que se dice que uno o dos tragos de mezcal, whisky, tequila o aguardiente pueden ayudar a estabilizar el organismo.

De acuerdo con el artículo Enfermedades tradicionales: culturales (susto, empacho, mal de ojo, caída de mollera, disentería y anginas), de la investigadora Inés Aimme Iturbide Pardiñas, después de vivir una experiencia de susto, el cuerpo suelta energía nociva para la salud y se cree que se expulsa de varias maneras, como:

De ahí que en lugares como Mérida, Yucatán, la bebida a la que se recurre después de un susto es la cerveza. Mientras que en Oaxaca el líquido requerido es el mezcal .

En México existe una vasta cantidad de hierbas que se utilizan en la medicina tradicional, las más amargas sirven para tranquilizar a una persona y aliviarlas del susto; como por ejemplo tila, albahaca, epazote, pirul, romero, ruda y pericón.

Cabe resaltar que el olor también ayuda a eliminar la tensión que dejó en el cuerpo el susto, por lo que el hecho de pasar una rama de alguna de estas hierbas pueden beneficiar a la relajación y a respirar con calma.

Incluso algunas herbolarias ponen a la venta productos para curar el espanto y el susto; líquidos traslúcidos y aromáticos que se huelen o untan, según lo indicando.

Finalmente, se dice que estas son otro de los remedios para aliviar el susto debido a que contienen un químico conocido como fenilalanina que favorece a la producción de dopamina para sentirse tranquilo y concentrado. Además, como es un fruto seco que contiene ácidos grasos, su consumo permite tener un mejor desempeño cognitivo para resolver más rápido cualquier angustia.

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