La problemática de Pemex y retos para el próximo sexenio

De los grandes desafíos para el próximo sexenio es lo relativo a lo que suceda con Pemex. Nuestra petrolera no vive sus mejores momentos y el actual gobierno ha tenido que inyectarle millonarios recursos.

La problemática de Pemex es añeja pero se agravó por el cambio de política pública para favorecerla. El diagnóstico ha resultado equivocado porque los grandes yacimientos están en aguas profundas y se requiere el concurso de la ip.

hacia eso se caminaba con la reforma energética de la época de epn pero en este gobierno hubo un cambio de 180 grados. Además han faltado expertos para mejorar su perfil financiero. Pemex se ha convertido en un barril sin fondo y se ve complicado que el gobierno pueda dejar de inyectarle fondos.

Si bien ya comienzan a aparecer nombres de empresas particulares en la explotación de yacimientos, no son los grandes actores que puedan hacer diferencia. Tampoco es muy rentable orientar las baterías a refinar gasolina cuando esa actividad es un “commoditie” en el mundo: dos bocas costó mucho y no hará diferencia. La esperanza es que para el próximo sexenio haya un cambio de enfoque: de lo contrario Pemex se mantendrá como fuente de costo.