Industria de vehículos pesados en 2025: incertidumbre y desafíos en el horizonte

La industria de vehículos pesados enfrenta un panorama complicado en 2025. Con indicadores económicos desfavorables y el riesgo de una recesión antes del segundo trimestre, el mercado de autobuses, camiones y tractocamiones ya muestra señales de desaceleración. Las ventas, la producción y las exportaciones han caído en los primeros meses del año, afectadas por el menor dinamismo económico en EE.UU. y la amenaza arancelaria de Donald Trump, prevista para abril.

Además, la incertidumbre interna en México, con políticas públicas en proceso como la reforma judicial, ha frenado la toma de decisiones en las empresas. En un entorno donde la inversión en transporte depende de la confianza en el futuro, la falta de claridad y el posible decrecimiento económico a finales de año podrían generar un freno aún mayor para el sector.

La mayoría de los indicadores económicos recientes son desfavorables, en el tenor de un 2025 muy difícil. Los expertos no descartan que la economía esté en recesión antes de que concluya el primer cuatrimestre.

También el desempeño del mercado de los vehículos pesados (autobuses, camiones y tractocamiones) no ha podido sustraerse a esa dinámica. En el primer bimestre hubo ventas negativas y también cayó la producción y las exportaciones, porque igual la economía de eu caminará más lenta este año. Además está la amenaza arancelaria de Donald Trump que iniciaría en abril.

Al menos en el arranque del año la incertidumbre ha retrasado la toma de decisiones en las empresas. También algunas políticas públicas en proceso como la reforma judicial no ayudan. Al final la compra de los vehículos pesados se relaciona con las expectativas a futuro. Más transporte de mercancías y de personas: pero si no hay claridad esas inversiones se pausan, máxime con una economía que podría decrecer a finales del año.